La FAO explicó que al convertir las sobras de la comida en nuevos productos o ingredientes se evita echar a la basura recursos como semillas, agua, piensos, dinero y mano de obra.
A nivel mundial se pierde o desperdicia un tercio de todos los alimentos producidos, equivalente a 1 mil 300 millones de toneladas al año, estimó en 2011 la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
De tal manera que no consumir los alimentos, ya sea porque se caducan o porque son sobrantes, significa echar a la basura o desperdiciar recursos como: semillas, agua, piensos, dinero y la mano de obra necesarios para producirlos.
Por tal motivo, el reaprovechamiento ya no es exclusivo de la basura, ropa, mobiliario o agua, pues ahora también se aplica a la comida, a lo cual se le ha denominado suprarreciclar los alimentos y que de acuerdo con la FAO significa: convertir artículos que normalmente se habrían derrochado en nuevos productos o ingredientes.
Al respecto, el chef y embajador de buena voluntad de la FAO para el Japón, Katsuhiro Nakamura, aseguró que “se puede hacer cualquier cosa a partir de sobras […] Los ingredientes no cuestan nada, puesto que se habrían desechado”.
En este contexto, explicó que tras analizar cómo utilizar los bananos completos, incluida la piel, elaboró el confit de banano, que consiste en bananos enteros confitados marinados en azúcar por una semana y secados durante un par de días.
“Deben marinarse durante una semana como mínimo, pero el resultado es excelente. Todos los alimentos son una bendición de la naturaleza”, agregó.
De igual manera, recordó que el pan duro puede aprovecharse para hacer postres. “Antes, si sobraba pan, simplemente lo tirábamos. Pero esto ahora es inaceptable. Ahora lo utilizamos para hacer pudin”.
Asimismo, la FAO recomendó convertir la comida sobrante en el almuerzo o en la cena del día siguiente, para lo cual se pueden buscar recetas creativas en internet para usar las sobras de comida, pues platillos como el gulash, el fattoush y la panzanella fueron creados a partir del deseo de no desperdiciar frutas, hortalizas o pan.
De tal manera que no consumir los alimentos, ya sea porque se caducan o porque son sobrantes, significa echar a la basura o desperdiciar recursos como: semillas, agua, piensos, dinero y la mano de obra necesarios para producirlos.
Por tal motivo, el reaprovechamiento ya no es exclusivo de la basura, ropa, mobiliario o agua, pues ahora también se aplica a la comida, a lo cual se le ha denominado suprarreciclar los alimentos y que de acuerdo con la FAO significa: convertir artículos que normalmente se habrían derrochado en nuevos productos o ingredientes.
Al respecto, el chef y embajador de buena voluntad de la FAO para el Japón, Katsuhiro Nakamura, aseguró que “se puede hacer cualquier cosa a partir de sobras […] Los ingredientes no cuestan nada, puesto que se habrían desechado”.
En este contexto, explicó que tras analizar cómo utilizar los bananos completos, incluida la piel, elaboró el confit de banano, que consiste en bananos enteros confitados marinados en azúcar por una semana y secados durante un par de días.
“Deben marinarse durante una semana como mínimo, pero el resultado es excelente. Todos los alimentos son una bendición de la naturaleza”, agregó.
De igual manera, recordó que el pan duro puede aprovecharse para hacer postres. “Antes, si sobraba pan, simplemente lo tirábamos. Pero esto ahora es inaceptable. Ahora lo utilizamos para hacer pudin”.
Asimismo, la FAO recomendó convertir la comida sobrante en el almuerzo o en la cena del día siguiente, para lo cual se pueden buscar recetas creativas en internet para usar las sobras de comida, pues platillos como el gulash, el fattoush y la panzanella fueron creados a partir del deseo de no desperdiciar frutas, hortalizas o pan.
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