Principalmente en Alemania, Estados Unidos, Reino Unido y China su demanda es alta, por lo que su comercialización ya está regulada por CITES, además, ya existe una guía que permitirá identificarlos para evitar su exportación ilícita.
De acuerdo con el director general de Cooperación Internacional e Implementación de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), Hesiquio Benítez Díaz, los dragoncitos mexicanos tienen una alta demanda en el comercio internacional, principalmente en Alemania, Estados Unidos, Reino Unido y China, en donde un ejemplar se ofrece hasta en 4 mil euros.
Por tal motivo, en 2016, a propuesta de México y la Unión Europea, los dragoncitos fueron incluidos en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), lo que permite que desde 2017 su comercio internacional esté regulado.
De tal manera que ya se requieren documentos que muestren su legal procedencia, “tiene que haber un permiso, un dictamen de extracción no perjudicial donde se demuestre que si viene de la naturaleza no haya impacto […] o si viene de un criadero que está reproduciendo estas especies”.
El investigador detalló que “algunas de ellas se encuentran en alguna categoría de riesgo en nuestra legislación nacional: cinco de ellas en peligro, ocho amenazadas, dos bajo protección especial; y también la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza las reconoce bajo distintas categorías”.
Por su parte, el biólogo Óscar Sánchez indicó que a pesar de que no se ha dado autorización para estas especies en el extranjero, ya se encuentran vendiéndose en internet de manera ilegal, por lo que la Guía de Identificación de los Dragoncitos de la Conabio, ayudará a identificar las especies para evitar su extracción y tráfico ilegal.
“Lo que preocupa es que nuestra diversidad genética ya está afuera”, debido a que la gente ha sacado ilegalmente a esos animales que se están reproduciendo afuera y cuyas ganancias no son para las comunidades mexicanas, “sino son para gente que ilegalmente se llevó a esos animales y los están reproduciendo en otros países. El tema central es proteger a las poblaciones silvestres en sus lugares silvestres”, destacó durante la Semana de la Diversidad Biológica 2018.
La directora general de Inspección Ambiental en Puertos, Aeropuertos y Fronteras de la Profepa, Karla Acosta, consideró que la labor que realizan se fortalecerá con la Guía de Identificación de los Dragoncitos, porque al reconocerlos se contribuirá a la protección de las especies.
“Instrumentos como esta guía de Abronia para nosotros como personal operativo es material muy valioso que nos ayuda desde el punto de vista de la aplicación de la ley […] para prevenir el tráfico ilegal, porque difunde el conocimiento de estas especies por un lado y por otro lado, nos ayuda como inspectores a trabajar en su identificación en el momento en que se necesita”.
Recordó que aproximadamente 150 inspectores verifican la importación y exportación legal de productos de flora y fauna silvestres y previenen el tráfico ilegal de estas especies protegidas, tanto por los instrumentos nacionales como los internacionales en México.
Fuente: Mira tu México
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