El diputado Germán Ralis explicó que puede generar afectaciones a la glándula de la tiroides, provocar una disfuncionalidad metabólica, adormecimiento de manos, temblores musculares, nerviosismo, entre otros aspectos.
De acuerdo con el diputado Germán Ernesto Ralis Cumplido, la distribución de carne contaminada con clembuterol pone al público como presa de consumir carne infectada sin saberlo y sin que exista un responsable por los daños ocasionados a la salud.
Esto considerando que genera afectaciones a la glándula de la tiroides, provoca una disfuncionalidad metabólica, así como adormecimiento de manos, temblores musculares, nerviosismo, dolores de cabeza y musculares e intoxicación.
“Si bien, la probabilidad de quedar intoxicado con esta sustancia es baja, todos estos riesgos en la salud se pueden evitar si se logra impedir la distribución y venta de estos productos”, refirió Ralis Cumplido.
Asimismo, recordó que en 2014 Cofepris realizó un estudio sobre carne contaminada con clembuterol, para lo cual adquirió 90 lotes de carne de res de 2.5 kilos cada una, comprada en lugares donde anteriormente se había detectado contaminación y en localidades con casos de personas intoxicadas, separándolas por código y por voluntarios.
Posteriormente, de las 1 mil 916 muestras, 938 resultaron positivas a la sustancia, en algunos casos con concentraciones muy elevadas; incluso, Cofepris mencionó que para que los análisis antidopaje de un deportista salgan alterados, tendría que comer en promedio de 3.3 a 620 kilos.
Sin embargo, dentro de los resultados de los voluntarios del estudio se descubrió que con sólo consumir de una a tres hamburguesas de 250 gramos cada una, es suficiente para dar positivo de clembuterol.
PLANTEA CONTROLES MÁS ESTRICTOS PARA SU DETECCIÓN
En su punto de acuerdo presentado el 27 de mayo en la Comisión Permanente, el legislador Ralis Cumplido también refirió que los criadores de vacas, cerdos y pollos utilizan clembuterol para engordarlos de manera rápida, a fin de poder comercializar su carne y aumentar la producción y venta, además de esta irresponsabilidad, existen medidas efectivas por parte del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) al permitir la compra-venta de estos productos sin ninguna restricción, cuidado y vigilancia.
Por tal motivo, planteó exhortar a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, a la Secretaría de Salud y a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), a establecer controles más estrictos y permanentes en las revisiones a rastros, distribuidoras de carne y carnicerías para detectar contaminación por clembuterol y evitar su comercialización.
Incluso, según la Ley Federal de Sanidad Animal y la Ley General de Salud, Sagarpa debe inspeccionar los establecimientos y las mercancías de origen animal reguladas, así como vigilar los alimentos y bebidas, además de las sustancias toxicas o peligrosas para la salud utilizadas en la elaboración de los productos.
Fuente: Cámara de Diputados
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