El dictamen avalado por la Cámara de Diputados establece que las personas que requieren de estos canes deben tenerlos a su lado en los aviones o cualquier tipo de transporte.
Con el objetivo de reconocer los derechos humanos de quienes necesitan de los canes para realizar sus actividades, así como garantizarles su libre acceso a espacios públicos y privados, la Cámara de Diputados aprobó el 12 de abril, un dictamen para crear la Ley de los Derechos de las Personas Usuarias de Perros Guía o Animales de Servicio, compuesta de 30 artículos y cuatro transitorios.
El documento, enviado al Senado de la República, establece que estos usuarios pueden entrar a los espacios en general en condiciones de igualdad con el resto de las personas; ampara su deambulación en el transporte y la permanencia del perro guía o animal de servicio a su lado; también instituye que en los aviones o cualquier tipo de transporte aéreo, el perro deberá mantenerse al lado de su dueño.
Incluso, en las zonas de abordaje de transporte público, las autoridades de seguridad y personal deben apoyar a estas personas para ubicarlas en un espacio seguro, a fin de que aborden el transporte.
Prohíbe cualquier tipo de discriminación en los procesos de selección laboral, así como en el desarrollo de sus actividades profesionales. De tal manera que durante el tiempo de trabajo, tiene derecho a mantener a su lado en todo momento a su guía.
“La aprobación de esta ley significa un gran avance para nuestro país en el tema de discapacidad, no discriminación, inclusión e igualdad, así como en la salvaguarda de los derechos humanos de todos los mexicanos”, manifestó la diputada Kathia María Bolio Pinelo, promovente de la iniciativa.
Por su parte, la legisladora Brenda Borunda Espinoza dijo que esta ley creará un marco regulatorio eficiente, al establecer derechos y obligaciones de quienes emplean a estas especies, sancionar a los que nieguen injustificadamente el acceso a lugares de uso público, y velar por la seguridad de los perros guía y los animales de servicio, pues las autoridades competentes establecerán una serie de cuidados mínimos que aseguren su bienestar y seguridad.
En este sentido, refirió que los perros guía permiten la libre movilidad de los beneficiarios, dándoles independencia, al fungir como sus ojos; y actualmente hay canes que cuidan a personas con diabetes, epilepsia y, gracias a su entrenamiento, son capaces de identificar cuando alguien necesita de una dosis de insulina o medicamento para evitar una crisis médica. “Son una magnifica terapia para aquellos que tienen depresión crónica, autismo o diversos trastornos neurológicos”.
Tan sólo en el país viven más de siete millones de personas con algún tipo de discapacidad, de las cuales 58.9% tiene debilidad visual y necesitan de la ayuda de un perro guía, y 30% de esta población tiene un empleo formal, en cuyo lugar de trabajo cuenta con las condiciones óptimas para su desarrollo, pero aún no se garantiza la entrada al resto de los espacios, aseguró.
Cabe destacar que este ordenamiento jurídico fue posible gracias a la participación activa y propositiva de los diputados Federico Döring Casar, Brenda Borunda Espinoza y Javier Herrera Borunda, así como de asociaciones de la sociedad civil y de la Comisión de Grupos Vulnerables.
El Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad (Conadis), indica que las personas con discapacidad pueden ingresar con su perro guía a cualquier lugar público, incluyendo restaurantes, pues de acuerdo con el artículo 58 de La Ley Federal del Protección a los Derechos del Consumidor, no se puede negar el servicio ni cobrar cuotas extra por el perro guía.
Fuente: Cámara de Diputados /Conadis
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